#Lightbasics: Hablemos de luminancia...

La luminancia, a diferencia de la iluminancia, sí la podemos ver. El ojo humano no percibe la luz que llega a un objeto sólo la luz reflejada, por lo que la luminancia es la cuantificación de la intensidad de luz emitida por una superficie dada. Esta puede ser un cuerpo luminoso o cualquier objeto o material que refleje, absorba y transmita luz. Además, nos permite describir la diferencia de brillo entre dos objetos o áreas dentro del ambiente, entendiendo que el brillo es la sensación subjetiva que experimentamos al mirar un objeto o superficie, mientras que la luminancia en sí, es la medida objetiva de la intensidad luminosa.



Entrando en materia, los colores claros siempre reflejarán un mayor porcentaje de ondas de luz, mientras que los colores oscuros reflejarán un menor porcentaje de ondas de luz, absorbiendo el resto. Por lo tanto, se produce mayor luminancia en superficies claras y mates, mientras que en superficies oscuras se producirá mayor contraste. Lo anterior nos lleva a afirmar que el objeto o la superficie puede convertirse en una segunda fuente de luz (debido a la luz reflejada).


El ser humano es una criatura visual por naturaleza, el 80% de la información que recibimos es visual.

Dependiendo de la cantidad de luz, nuestra visión puede cambiar. Si estamos en un ambiente con mucha luz, nuestra visión será fotópica, funcionarán tanto los conos como los bastones. Si estamos en un ambiente oscuro, será llamada escotópica, funcionarán fundamentalmente los bastones, no podremos distinguir colores ni podremos enfocar. Y por último la mezcla de estos dos se denomina visión mesópica, y podemos apreciarla sobretodo en amaneceres y atardeceres.



En términos de diseño...
La luminancia nos permite producir contraste y jerarquía, puede acentuar o negar la percepción de profundidad.
Las proporciones de luminancia (relación de contraste) dependerán del efecto que se desea realizar en el espacio. Para interiores uniformes, relaciones de 10:9 o 5:4 son ideales; para salidas de emergencia, 20:1, para realizar un efecto dramático, 10:1. Relaciones de uniformidad de 20:1 ya son objetables y pueden producir una sensación de malestar visual.

Dicho lo anterior, es fundamental cuidar el aspecto del deslumbramiento. Entendamos con ello dos conceptos: el deslumbramiento, que es la sensación de discomfort a razón del nivel de luminancia de algo, y de su posición dentro del campo visual; y por otro lado, los brillantes, el control positivo del deslumbramiento y que se definen como las luces brillantes que podemos tolerar, dependiendo del estado de ánimo, el ambiente, las necesidades y el contexto. (Abordaremos esto más a detalle en otra entrega futura.)



En términos de energía luminosa y unidades de iluminación...
La luminancia se mide en candelas por metro cuadrado (cd/m2) o en pies-lambert (fL).
Los estándares nacionales e internacionales no norman a la luminancia, salvo en casos muy específicos y particulares. Por lo que es más común que para cumplir las normativas se soliciten niveles promedio de iluminancia (lux), los cuáles son más fáciles de medir y calcular, y dependen casi enteramente de la fuente luminosa y su potencia y no tanto del contexto ni de los objetos y superficies.

Te recomiendo...
Que googlées acerca de la pintura (y la fotografía) Claroscuro para que juzgues la importancia de la sombra y del contraste; También busca la Linterna Mayuhana de Toyo Ito para que puedas analizar la diferencia entre deslumbramiento y brillante; por último, busca la fotografía de Léon Gimpel del Salon d'Automne, Paris, en donde verás otro ejemplo de lo que es el uso cotidiano de la luminancia, el contraste y los brillantes.

Abstracto, textos y dibujos: Alex Carrillo
Con información de:
Perspectivas de la luz, entre la cultura y la tecnología. Por ERCO,
Iluminación arquitectónica, diseñando con luz y espacio. Por Hervé Descottes y Cecilia E. Ramos, y
Luz para artistas visuales: Entendiendo y usando la luz en el arte y el diseño. Por Richard Yot